miércoles, 10 de agosto de 2011


Dicen que para olvidarte
tengo que viajar a Marte,
hacer 300 años de terapia y decidir,
dejar que pase el mes de Abril,
juntar todas las hojas del otoño.
Dicen que para olvidarte
hay que tener en el bolsillo
un almanaque sin domingos,
un crucero y navegar en un océano sin mar, 
tomarse toda el agua de la lluvia.


Y en realidad,

hay cosas que no voy a olvidar       (Ni quiero)

Como tus ojos de soledad, la tarde que los hice llorar